Además de tu amor y atención, tu perro puede vivir más y mejor si conoces cuáles son aquellas cosas que le hacen bien y cuáles son los problemas de salud más comunes que pueden afectarlo a lo largo de su vida.
Tres pilares para una buena salud
Un estilo de vida activo, una dieta saludable y visitas regulares al veterinario son importantes en todas y cada una de las etapas de la vida de tu perro, pero son vitales cuando empieza a envejecer.
Una dieta desequilibrada por exceso de macronutrientes podría causar sobrepeso u obesidad, mientras que una deficiencia de micronutrientes, como por ejemplo una baja ingesta de hierro, podría asociarse a condiciones de salud más grave, como la diabetes o la anemia. La investigación científica ha permitido arribar a un consenso en cuanto al rol de una nutrición adecuada y la actividad física regular en el mantenimiento de la salud y el bienestar. Una visita anual al veterinario contribuirá tanto a mantener a tu perro al día con sus vacunas contra enfermedades infecciosas como a controlar los factores de riesgo de ciertas enfermedades.
Reconocer las enfermedades más frecuentes
Informarte acerca de cómo identificar las enfermedades y trastornos que más frecuentemente pueden afectar a tu perro, te permitirá prevenirlas y mejorar su calidad de vida. Una alimentación equilibrada y un programa de ejercicio adecuado que evite las lesiones, contribuirá a mantenerlo sano por más tiempo. Estas consignas son de vital importancia cuando tu perro comienza a experimentar los cambios corporales asociados con el proceso de envejecimiento, lo cual aumentará su predisposición a sufrir ciertos problemas de salud.
Como cualquier ser vivo, el cuerpo de un perro es una maquinaria perfecta donde cada elemento realiza una función específica y es a su vez parte de un sistema. Los sistemas corporales están íntimamente interconectados y funcionan armónicamente como un todo. La mayoría de los problemas de salud se producen cuando por alguna razón se alteran las funciones normales de estos sistemas, ya sea el respiratorio, nervioso, circulatorio, digestivo, urinario, musculoesquelético, hormonal o alguno de los órganos sensoriales.
Aún cuando son necesarios los controles de salud regulares, y un veterinario es el único capacitado para realizar un diagnóstico preciso, la siguiente tabla puede servirte como guía para identificar los problemas de salud más comunes, especialmente en perros de edad avanzada.
















